jueves, 30 de agosto de 2012

Taller en Cerrillos (31/08): La belleza de la orquesta

La amplia paleta de colores de la orquesta sinfónica será protagonista en el concierto de mañana, que parte con una novedosa obra (2003) del compositor y pianista argentino Jorge Pepi-Alos (1962), radicado en nuestro país y profesor de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile.


Los Cuatro Estudios para Orquesta fueron encargados por el Conservatorio Neuchatelois (Suiza) para la “Fiesta del Conservatorio 2003”, y se estructuran del siguiente modo:
I- Volúmenes y Líneas
II- Ornamentos
III- Timbres
IV- Ritmos
El maestro Pepi-Alos señala en su sitio web: "No hay que interpretar mis Cuatro Estudios como un Concierto para Orquesta, ya que se trata de un trabajo personal sobre la formación sinfónica tradicional, tratando de desarrollar al máximo mis posibilidades actuales de orquestación, estructuración, equilibrio sonoro y tantos otros parámetros de la composición orquestal.
En el primero, las masas (volúmenes) y los individuos (líneas) están en constante dialogo (o lucha).La preponderancia inicial de volúmenes sobre líneas evoluciona inversamente hacia el apacible final, produciendo un intercambio de poderes.
El segundo estudio es como un scherzo, efímero y liviano. En él, las ornamentaciones están tratadas como elemento principal, estructurando la pieza, contrariamente a la idea de “adorno” o “agrément” que serviría solo para “embellecer” la obra.
En “Timbres” (probablemente el más complejo de los cuatro) me propuse, utópicamente, de producir combinaciones tímbricas irrepetibles; yendo de las más puras (solos) a las más complejas (tutti).
“Ritmos” es la orquestación de una obra preexistente. Efectivamente, “Metamorfosis I” para piano, pieza escrita en 1992 es la base de este estudio donde las pulsaciones insistentes y los cambios de tiempo originaron su nombre."
Lamentablemente no encontramos registro en video de esta obra, pero sí de la versión pianística de "Metamorfosis I", que puede adelantarnos algo sobre el trabajo:


El programa continúa con el primer concierto para piano del maestro húngaro Franz Liszt (1811-1886) (puede encontrarse su biografía completa acá). Sin duda el principal pianista de la historia, Liszt revolucionó su época al "inventar" el recital "de virtuoso" y es un prolífico escritor también para la orquesta (con influencias de Berlioz y su yerno Richard Wagner, geniales en el manejo de los volúmenes y timbres instrumentales).


El Concierto para piano y orquesta n.º 1 en mi bemol mayor, R 455, S.124 fue terminado por Liszt en 1849, y estrenado seis años más tarde, el 17 de febrero de 1855, con el propio autor actuando como solista y Hector Berlioz al frente de la orquesta. En la partitura manuscrita, Liszt denominó esta obra como concerto symphonique. Este concierto está considerado como el más brillante, perfecto y popular de todos los que Liszt compuso. No expresa ni mundos contemplativos, ni ideas profundas, entre otras cosas porque Liszt nunca estuvo interesado en destacar en sus obras esas características, excepto en contadas ocasiones. El concierto es de una fuerza superior a la de su posible trascendencia. Tal vez la característica más acusada sea la del interés con que, sin que el piano pierda protagonismo, participe la orquesta, ya sea con intervenciones de distintos solistas, ya en los tutti de una formación que emplea, lejos de limitaciones clásicas, todo un conjunto, incluidos los trombones y una rica y brillante percusión. Los movimientos son: Allegro maestoso, Quasi adagio, Allegretto vivace - Allegro animato y Allegro marziale animato.
Les dejamos una versión del pianista del momento, el joven virtuoso chino Lang Lang, registrada el año pasado en el Royal Albert Hall de Londres con la Orquesta de la BBC:


El programa termina con el majestuoso Concierto para Orquesta del compositor húngaro Béla Bartók (1881-1945) (biografía completa acá), a quien Stravinsky llamara "el santo de la música del siglo XX". 


El Concierto para orquesta (1942-1943) es una partitura brillantísima que ha contribuido mucho a la fama del compositor aunque no es, quizás, su obra maestra definitiva. De cualquier forma, es la composición que facilita un mejor acceso del público en general a la música de Bartók. De una orquestación esplendorosa, a veces un tanto pesada (Metales), no es la partitura más novedosa de Bartók. Desde sus primeras y exitosas audiciones, el compositor fue acusado de conservadurismo, de haberse plegado a la “manera norteamericana”. Pero, a pesar de todo, la obra sorprende por su energía y vitalidad, algo impropio de una persona ya enferma como Bartók y que moriría tan sólo dos años más tarde. A semejanza de los concerti grossi del siglo XVII, el Concierto para orquesta suele oponer un instrumento o un grupo de ellos al resto de la orquesta, explotando todos los recursos tímbricos de la moderna orquesta. La obra consta de cinco partes que se suceden en el orden vivo-moderado-lento-moderado-vivo y en donde, según palabras del propio Bartók, “se produce una transición gradual de la austeridad del primer movimiento hasta la afirmación vital del último”.
Les dejamos una versión registrada en 1977 por la Sinfónica de Los Angeles (California), bajo la dirección del celebrado maestro hindú Zubin Mehta, uno de los mejores directores del siglo.


Un programa, en síntesis, maravilloso para acercarse al pleno desarrollo de las posibilidades técnicas y estilísticas de la orquesta, a cargo del excelente director húngaro (¿quién mejor para entender la obra de dos compatriotas?) Zsolt Nagy, a quien ya pudimos aplaudir ayer en el programa de música de cámara (Schönberg, Stravinsky, Ravel).



Como solista en el concierto de Liszt, tendremos la oportunidad de ver y escuchar al pianista letón Armand Abols, radicado desde hace varios años en el sur de Chile. Abols estudió con Ilze Graubina en la Academia de Música Jazeps Vitols de Letonia,  titulándose con distinción máxima como intérprete y profesor de piano. Realizó estudios de posgrado en el Instituto de Música de Cleveland, EE.UU. con el afamado pianista Sergei Babayan. Ha sido profesor en la Escuela Moderna de Música en Santiago y miembro del jurado en el Concurso Internacional de Piano “Dr. Luis Sigall” de Viña del Mar y Concursos de Piano “Claudio Arrau”.


No disponemos de registro en video de Abols para el Concierto de Liszt, pero - como un regalo especial - les dejamos una versión completa de los 24 Preludios de Frédéric Chopin:


lunes, 27 de agosto de 2012

Taller en La Cisterna (Miércoles 29 de agosto): Un programa moderno

Esta semana tendremos un experimento tal vez difícil, pero interesante: enfrentar a auditores noveles con obras de un lenguaje musical muy diferente al que están acostumbrados a escuchar, un lenguaje que les sonará absolutamente moderno pese a que todas las piezas fueron escritas hace ya cien años... Intentaremos que este encuentro sea lo más fructífero y esclarecedor posible, y por mientras dejamos algunos antecedentes.


El programa de esta semana, que además no es a orquesta completa sino con un grupo escogido de instrumentistas, o sea, un programa "de cámara", comienza con el "Pierrot Lunaire", de Arnold Schönberg (arriba lo vemos en uno de los varios autorretratos en los que se pintó).
Schönberg (Viena, 13 de septiembre de 1874 – Los Ángeles, California,13 de julio de 1951) - o Schoenberg, como sería conocido luego de emigrar a los Estados Unidos - es uno de los principales renovadores de la música del siglo XX (ver acá su biografía completa). Con él, la música occidental - que ya venía cambiando en los últimos años del siglo XIX y primeros del XX - entra en un mundo completamente nuevo, cuando el compositor reemplaza el sistema tonal - que todos conocemos y usamos aún, con sus escalas mayor y menor - por un método distinto, que asigna el mismo valor a cada una de las 12 notas de la escala cromática (ver cómo es la escala aquí)


Dreimal sieben Gedichte aus Albert Girauds 'Pierrot lunaire', ("tres veces siete poemas de Pierrot Lunaire de Albert Giraud"), conocido comúnmente como Pierrot Lunaire, Op. 21, es un ciclo de canciones compuesto sobre 21 poemas de la traducción realizada por Otto Erich Hartleben del ciclo de poemas franceses del mismo nombre de Albert Giraud (pueden leerse en versión bilingüe aquí). La obra se estrenó en el Berlín Choralion-saal en octubre de 1912, con la soprano Albertine Zehme (que los había encargado) como vocalista. Los poemas están musicalizados en el estilo Sprechstimme (hablado), lo que complementa el estado de ánimo de los poemas. La obra es atonal, pero no dodecafónica, dado que Schoenberg comenzó a experimentar con el dodecafonismo en un punto posterior de su carrera. La instrumentación es bastante variada, cambiando las combinaciones en cada canción.
Les dejamos una versión completa de la obra, grabada en Italia en 2010, con la soprano Alda Caiello como solista:




El programa continúa con "Tres poemas de la lírica japonesa", que el gran compositor ruso Igor Stravinsky, otro de los próceres de la música del siglo XX (ver su biografía completa acá), compuso en 1913, en parte impresionado por la audición del "Pierrot Lunaire", hecho que determinó la elección de un pequeño grupo instrumental para su orquestación. 


El interés por la poesía japonesa surgió en Stravinsky por su asociación con la llamada Société des Apaches, grupo de compositores, pintores, escritores y críticos de arte franceses formado a principios de 1900 en París. Entre sus miembros estaba el compositor Maurice Delage (1879-1961) quien tenía gran interés en la música hindú y asiática. En ese entorno artístico en donde predominaba la atención a las culturas africana y asiática, surgió el interés de Stravinsky por la lírica japonesa. Los nombres de las tres poesías (Akahito, Mazatsumi y Tsaraiuki) corresponden a tres poetas tradicionales japoneses que escribían en el género Haiku (miniaturas poéticas), y al parecer Stravinsky trabajó inicialmente con los textos en una versión rusa.Otros célebres miembros del grupo de los Apaches fueron Maurice Ravel, Florent Schmitt (1870-1958) y Manuel de Falla (1876-1946). Cada una de las tres poesías a las que Stravinsky puso música fue dedicada a miembros de la mencionada sociedad.
Les dejamos una versión de la soprano Evelyn Lear, con miembros de la Columbia Symphony dirigidos por Robert Craft:



El programa concluye con las "Tres canciones sobre poemas de Stéphane Mallarmé", del compositor francés Maurice Ravel (1875 - 1937) (ver acá su biografía completa)


En una entrevista en 1927 Maurice Ravel dijo sobre el poeta simbolista Stéphane Mallarmé: "ha exorcizado nuestro lenguaje, como el mago que es. Ha liberado los pensamientos alados, los sueños inconcientes de su prisión." Ravel pusó música a tres poemas de Mallarmé después de haber escuchado las "Tres poesías de la lírica japonesa" de Stravinsky, tras lo cual quedó particularmente impresionado por su ensemble de piano, cuarteto de cuerdas, dos flautas y dos clarinetes. Stravinsky - como ya dijimos - a su vez había sido influenciado por la original orquestación de "Pierrot Lunaire" de Arnold Schönberg. La singular forma y uso de la disonancia presentes en la obra de Ravel reflejan también el espíritu de los poemas y así encontramos música delicada, frágil por momentos, pero llena de la maestría que es firma de este gran maestro.
Les dejamos una versión de la soprano Nora Gubisch, con el Ensemble Intercontemporain, dirigidos por Alain Altinoglu:



Una vez completadas sus piezas usando la misma instrumentación que Stravinsky, Ravel convocó a lo que llamó "Concierto escandaloso", donde habrían de tocarse las tres obras antes mencionadas. Dicho concierto tuvo lugar en enero de 1914, pero remplazando las canciones de Schönberg por obras de Maurice Delage (que, como ya se dijo, perteneció al grupo de "Los Apaches")
Como Ravel no tuvo la oportunidad de hacerlo en su tiempo, debiera estar feliz de que en Santiago de Chile, 100 años después, un grupo de músicos y yo podamos tocar este concierto tan contemporáneo para su época y tan difícil de interpretar en un solo programa”, afirma el director húngaro Zsolt Nagy (abajo, en la foto), que tiene a su cargo el concierto, donde intervendrán los siguientes intérpretes: en la voz, la soprano Nora Miranda, integrante de la Camerata Vocal; en flauta estarán Karina Fischer y Guillermo Lavado, en clarinetes, Alejandro Ortíz y Dante Burotto; en violín y viola Rodrigo Pozo; en violín Miguel Ángel Muñoz; en viola, Pablo Salinas; al violonchelo, Celso López; y frente al piano, Kuniko Shirakawa y Luis Alberto Latorre



sábado, 18 de agosto de 2012

Martes 21 de agosto: Recital del guitarrista Luis Orlandini

Un grupo seleccionado de usuarios de las bibliotecas de La Faena, La Granja y Renca podrán asistir, en forma extraordinaria, al recital de música francesa que ofrecerá el destacadísimo guitarrista nacional y director del Departamento de Música y Sonología de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Luis Orlandini. El recital forma parte de la temporada oficial del Departamento, que se está realizando en el Centro Cultural Gabriela Mistral, y nuestra presencia allí ha sido posible por una gentileza del GAM gestionada por el director de Comunicaciones de la Facultad, el académico Sergio Trabucco Zerán.



Nacido en Santiago en 1964, el maestro Orlandini estudió en la Facultad de Artes con el profesor Ernesto Quezada y luego con Eliot Fisk en la Escuela Superior de Música de Colonia, Alemania. También realizó un curso en el Mozarteum de Salzburgo, aparte de perfeccionarse con maestros de la talla de Oscar Ghiglia (discípulo de Andrés Segovia) y Eduardo Fernández. Su carrera como concertista lo ha llevado a presentarse en toda Europa, Asia y América. Asimismo, ha realizado numerosas grabaciones de música chilena y del repertorio guitarrístico universal. Pueden visitar su sitio web si quieren interiorizarse de su trayectoria en detalle. Para conocer a este gran artista, les dejamos dos videos: el primero, con su interpretación de la Sonata para Guitarra del compositor argentino Alberto Ginastera, en el marco del 4º Festival Anual Iberoamericano de Guitarra en Washington D.C. (EE.UU., 2010); el segundo es una entrevista concedida a la periodista Patricia Caicedo el año pasado en Fort Worth, Texas (EE.UU.)



El programa abarca casi cinco siglos de música francesa, y contempla tanto obras escritas originalmente para laúd, transcripciones de piezas para piano y trozos creados para la guitarra, principalmente en homenaje al gran divulgador del instrumento en el siglo pasado, el maestro español Andrés Segovia.
En la primera parte, escucharemos:

Ennemond Gaultier (1575-1651):
- Pieces en Re menor (Prélude / Tombeau de Mézangeau / Gigue “Testament de Mézangeau”)
Gaultier es el primer gran laudista francés, y es llamado "el Viejo" para diferenciarlo de su primo Denis, también compositor e intérprete de laúd, que es "el Joven". Les dejamos una de las piezas ejecutada en laúd, "Le tombeau (la tumba) de Mézangeau":


Jean Baptiste Lully (1632-1687):
- Ouverture de la grotte de Versailles (arreglo de Robert De Visée)
Aunque nacido en Italia, Lully llegó a ser director musical de la corte del rey Luis XIV de Francia, y se le recuerda como compositor de óperas y ballets. Les dejamos una versión de "Ouverture..." en tiorba, un instrumento barroco de mayores dimensiones que el laúd:


Robert De Visée (ca.1660- ca.1720):
- Suite en Sol Mayor (Prelude/Allemande/Courante/Sarabande/Gigue)
La suite es una colección de danzas, generalmente ordenadas por su velocidad: lenta - rápida, etc. De Visée fue también músico en la corte de Luis XIV. Les dejamos el Preludio de esa Suite ejecutado en tiorba:


Pierre de Bréville (1861-1949):
- Fantaisie (1926) (Estreno en Chile)
Bréville fue profesor del Conservatorio de París y crítico musical, aparte de compositor. Esta obra - escrita para Andrés Segovia - no llegó a estrenarse durante su vida y, según el maestro Orlandini, ha sido "injustamente olvidada". Aquí está la primera parte (Resolu), grabada por Kaori Muraji:


En la segunda parte del recital, se escuchará:
Albert Roussel (1869-1937):
- Segovia op.29 
Roussel escribió en 1929 esta pequeña obra, de gran brillo, dedicada a Andrés  Segovia, quien había conquistado París con su talento en 1924. Aquí una versión del gran guitarrista británico Julian Bream:


Claude Debussy (1862-1918):
- La fille aux cheveux de lin 
Esta breve pero armónicamente compleja pieza es quizá la más conocida del Primer Libro de Preludios (para piano) de Debussy, escrito entre 1909-1910. Hay múltiples transcripciones para guitarra. Aquí presentamos una versión de Jeimin Yang:


Georges Auric (1899-1983):
- Hommage à Alonso Mudarra (1960)
Famoso más que nada por sus bandas sonoras, Auric compuso esta pequeña pieza como un real homenaje al vihuelista español del Renacimiento Alonso Mudarra, cuya pieza "Fantasia que contrahaze la harpa en la manera de Ludovico" es citada un poco antes del final. Recia pero llena de humor, la obra pasó casi inadvertida hasta que fue grabada por Erling Møldrup y Emanuele Segre. Dejamos una versión de Otto Tolonen:



Francis Poulenc (1899-1963):
- Sarabande (1960)
Escrita en 1960, la pieza estaba dedicada a Ida Presti, que al parecer nunca la ejecutó. El tema inicial aparece en al menos dos obras anteriores de Poulenc: la Improvisación para piano Nº 13 en la menor y el último acto  de su ópera "El diálogo de las Carmelitas". Versión de Matthew McAllister registrada en la Catedral de San Pablo, en Dundee (Escocia):



Darius Milhaud (1892-1974):
- Segoviana op. 366  (1959)
Aunque indiscutiblemente inspirada en su figura, Segovia nunca tocó esta obra (se sabe que no le gustaba la música contemporánea). Pese a ello, forma parte del repertorio de la mayoría de los guitarristas actuales. Versión de Sanel Redzic:


Roland Dyens (1955- )
- Saudade nº3 (1980) “Lembrança do Senhor do Bonfim da Bahia” (I. Rituel / II. Danse / III. Fête et Final)
De esta obra escribe el guitarrista uruguayo Eduardo Fernández en 2005: "Otra visión de Brasil es la que presenta Roland Dyens (n. 1955) en su Saudade Nº 3, dedicada al recuerdo de la más famosa iglesia de las 365 que ornamentan la ciudad de Salvador, Bahía, la del Senhor de Bonfim. Dyens, un guitarrista y compositor francés de formación clásica, parece haber derivado hacia lo popular llevado por una necesidad interior. Sus obras, de las que Saudade Nº 3 es probablemente la más conocida, utilizan los recursos y los giros populares sin caer en lo meramente turístico, y explotan con gran virtuosismo las posibilidades de la guitarra." Versión de Kaori Muraji:


martes, 14 de agosto de 2012

Taller Nº 6 - Alvarado, Haydn y Beethoven (Viernes 17 de agosto)

El programa de la Orquesta Sinfónica para este viernes 17 de agosto nos permite saltar en el tiempo desde casi los inicios de la sinfonía al momento presente, ya que partiremos con el estreno mundial de una obra de un autor chileno actual para luego viajar hasta fines del siglo XVIII, a escuchar al gran compositor Joseph Haydn, y terminar con la Sexta Sinfonía "Pastoral" de Beethoven, en los inicios del siglo XIX.
Sin duda un buen programa para nuestro taller, ya que se nos da la posibilidad de apreciar estilos de composición y expresivos muy diversos, oportunidad que - como siempre - trataremos de aprovechar al máximo.
Dirige una vez más el maestro Eckart Preu (les ruego leer las entradas anteriores para conocerlo y saber, entonces, qué esperar de su trabajo, que estamos seguros será nuevamente brillante).


En primer término, asistiremos a la primera audición de "Emiliana". El compositor y académico Boris Alvarado (1962) ha estado ligado toda su vida a su ciudad natal, Valparaíso, ya que actualmente se desempeña como profesor en la Pontificia Universidad Católica del puerto, director de su Coro Femenino de Cámara y además es integrante del Consejo de la Cultura de esa ciudad patrimonial. Es magister en artes con mención en composición, por la Universidad de Chile; magister en composición y música sacra, por la Academia Estatal de Música de Cracovia (Polonia), y doctor en composición musical por la Academia de Música Fryderyk Chopin de Varsovia (Polonia) (puede encontrarse su biografía completa acá). “Ésta es una enorme oportunidad de realizar la difusión de mi trabajo en el medio chileno, considerando que gran parte de los estrenos mundiales de mis obras han sido fuera de nuestro país”, señaló el músico (http://prensa.ucv.cl/?p=5457
La pieza, de 13 minutos de duración, corresponde a un madrigal, estilo de composición de origen renacentista que trata temas profanos. El concepto de “madrigal amoroso” recuerda al músico Claudio Monteverdi, prolífico compositor de este tipo de creaciones. Alvarado dedicó cerca de un año y medio a escribir la obra, que describe como un “vuelo espiritual, amoroso y épico, en comunión con la naturaleza y los pájaros”. El compositor explica que este madrigal recoge la influencia de un poema sufí, palabra de origen árabe para describir a la persona con un grado de desarrollo espiritual. En él, el vuelo y la gestualidad de los pájaros representan los diversos arquetipos humanos con sus propias motivaciones para emprender el camino espiritual. En el poema, las aves descubren a lo largo de su viaje que lo que buscan no es otra cosa que a sí mismas. “Refleja que el camino es hacia el interior, y que la iluminación no es sino la apasionada unión de un alma individual con un ritmo y lo amoroso de lo humano”, subraya Alvarado.
Como obviamente no hay registros previos de "Emiliana", les dejamos otra obra del maestro Alvarado, grabada en Alemania en 2009 por el ensemble Antara, "Ritual Huilliche":


Luego, escucharemos la Sinfonía Nº 39 en sol menor, Hoboken I/39, del compositor austríaco Joseph Haydn, llamado por muchos "el padre de la sinfonía" y una de las cumbres de la historia de la música occidental. El nombre "Hoboken" corresponde a quien catalogó su obra, el musicólogo holandés Anthony van Hoboken (1887-1963).
Haydn (1732-1809) fue contemporáneo de Mozart y vivió toda su vida en Austria, pero gran parte de su obra se estrenó y tuvo mucha popularidad en Inglaterra. Su biografía completa, aquí. También pueden ver una breve biografía suya, narrada por el gran locutor chileno Raúl Matas, en YouTube:



La Sinfonía n.º 39 en sol menor fue compuesta en 1767 o 1768. Es la primera sinfonía en modo menor de Haydn asociada con su período de obras del Sturm und Drang (en castellano, "Tempestad e ímpetu", un movimiento literario alemán que desencadenó el Romanticismo). La obra influyó e inspiró futuras sinfonías en sol menor como las de Johann Baptist Vanhal, Johann Christian Bach  y el mismo Wolfgang Amadeus Mozart (la n.º 25).
Está orquestada para dos oboes, cuatro trompas (dos en si bemol y dos en sol) y cuerdas (violines divididos en dos, violas, chelos y contrabajos).La sinfonía consta de cuatro movimientos: Allegro assai (rápido), Andante (lento)en mi bemol mayor, Menuet (más ágil y bailable), y Finale: Allegro di molto (nuevamente rápido)
Les dejamos una versión de la Sinfonía grabada el año pasado por la Orquesta de la Radio Televisión Española, con su director titular, el maestro uruguayo Carlos Kalmar:


Después del intermedio, el concierto terminará con la Sexta Sinfonía en Fa Mayor, op. 68, llamada "Pastoral", del genial Ludwig van Beethoven. Sin duda todos han oído hablar del maestro Beethoven (1770-1827), uno de los más importantes compositores de toda la historia. Su biografía completa puede encontrarse acá


Quienes quieran profundizar en su vida y obra, pueden ver - entre muchos y muy ricos materiales - un completísimo documental de la BBC en tres capítulos en YouTube. Aquí les dejamos el primero:


La Sinfonía n.º 6 en fa mayor, Opus 68 "Pastoral" fue terminada por Beethoven en 1808, cuando ya se encontraba completamente sordo, y es paralela en escritura a la famosa "Quinta". Es una de sus pocas obras de música programática (o sea, que tiene una inspiración "visible", o narra una historia), y el compositor la subtituló "Recuerdos de la vida campestre". Beethoven fue un amante de la naturaleza, tanto así que pasaba gran parte de su tiempo caminando por el campo. Frecuentemente abandonaba Viena para trabajar en localidades rurales. No fue, sin embargo, el primer compositor en describir sinfónicamente la naturaleza: por ejemplo, en su oratorio Las Estaciones, estrenado en 1802, Joseph Haydn también describió escenas rurales, campesinos bailando, una tormenta, pájaros cantando, y otros similares. En los siglos anteriores, se había usado esta misma inspiración muchísimas veces.
Lo novedoso en Beethoven es que él no compone una obra cantada (o sea, con un libreto), sino que prefiere el lenguaje orquestal, sinfónico, buscando - como él mismo escribió - «más expresión de sentimientos que pintura de sonidos». También es original al agregar una quinta parte o movimiento al esquema de la sinfonía como forma musical, ya que hasta entonces contemplaba sólo 4. 
Estas cinco partes son: 
1. Allegro ma non troppo: «Despertar de alegres sentimientos con la llegada al campo»
2. Andante molto mosso: «Escena junto al arroyo»
3. Allegro: «Alegre reunión de campesinos»
4. Allegro: «Relámpagos. Tormenta»
5. Allegretto: «Himno de los pastores. Alegría y sentimientos de agradecimiento después de la tormenta»
Aunque es una obra algo larga (aproximadamente 40 minutos), es tan hermosa que el tiempo literalmente "se pasa volando". Les dejamos una versión completa de la Orquesta de la RAI (Radio Televisión Italiana):


En su maravillosa película "Fantasia", de 1940, Walt Disney incluyó una versión de la Sexta, que traslada la acción desde los alrededores de la Viena de comienzos del siglo XIX al mitológico Monte Olimpo, con sus dioses y animales fantásticos. Vale la pena disfrutarla:


domingo, 12 de agosto de 2012

¡Gracias, Maestro Preu!

... Y logramos conversar con Eckart Preu
Quienes asistimos al programa de la Orquesta Sinfónica de Chile del pasado viernes 10 de agosto, pudimos comprobar que todo lo que se decía de él era absolutamente cierto: un director comprometido con la música y el público, capaz de transmitir el sentimiento de obras tan diversas como "The unanswered question" de Ives (que, conforme a su estilo, presentó en un inglés clarísimo, excusándose por su desconocimiento del español y entregando sabrosas anécdotas sobre el compositor) y las "Danzas Sinfónicas de West Side Story" (con las que literalmente nos hizo bailar a todos, orquesta y público, dentro de la obra y luego con el "Mambo" como improvisado "encore"), que moja la camiseta para obtener que sus oyentes se conecten con el espíritu de la música que interpreta.
No es de extrañarse, entonces, por el gran aprecio que se le tiene en los Estados Unidos. Su simpatía hizo que nuestros usuarios no se quejaran por esperar 20 minutos para poder conocerlo, felicitarlo y fotografiarse con él. Visiblemente cansado - el programa era en verdad agotador - pero sonriente y cercano, escuchó con gentileza la explicación que le dimos sobre el Taller y sus participantes, y saludó efusivamente a cada uno, estableciendo un nexo de cordialidad más allá de las barreras del idioma y la cultura. Excepcional.
Ojalá le lleguen estas palabras de agradecimiento, que recogen los sinceros sentimientos de la gente. ¡Gracias, maestro, por su talento, su sencillez y su amabilidad! Gracias a usted, una vez más esta oportunidad se convirtió en un auténtico hito en la vida de nuestros usuarios asistentes.



jueves, 9 de agosto de 2012

Bernstein y Chile


No todo el mundo conoce la cercana relación que Leonard Bernstein tuvo con nuestro país: su única esposa fue la chilena Felicia Cohn Montealegre (con ella en la foto), hija de madre chilena y padre norteamericano, alto ejecutivo de la American Smelting and Refining Company. Nacida en 1922, Felicia (que fue educada en el catolicismo, pese a que su padre era judío) se estableció siendo jovencita en Nueva York, donde tomó clases con Claudio Arrau. Fue en una fiesta organizada por el pianista donde, en 1946, conoció a Bernstein. Aunque llegaron a comprometerse, los conflictos internos del músico provocaron la ruptura, y Felicia inició una nueva relación con el actor Richard Hart. Cuando éste murió, retomó su noviazgo con Bernstein y se casaron en 1951, para lo que ella tuvo que convertirse al judaísmo. El matrimonio tuvo tres hijos: Jamie, Alexander y Nina.
Felicia tuvo una carrera bastante activa como actriz de televisión y teatro en Estados Unidos hasta muy cerca de su fallecimiento en 1978. En 1976 protagonizó en Broadway la obra Poor murderer.
El compositor tenía, sin embargo, una vida muy compleja, que incluía una secreta bisexualidad. Según recuerda su hija Nina, su madre siempre ocultó con mucha discreción las infidelidades de su esposo, pero esto explotó en 1973, cuando lo encontró con su último amante en pleno lecho matrimonial. 
Bernstein se mudó con él a New York, pero regresó pronto con su esposa al enterarse que ella padecía de cáncer terminal, acompañándola hasta su muerte...
Un hecho casi anecdótico refuerza, además, este nexo de Leonard Bernstein con Chile: en 1971 recibió un encargo de Jacqueline Kennedy para una obra que debería ejecutarse en el acto inaugural del Kennedy Center, en Washington. El maestro escribió una obra de gran aliento, de tono pacifista, humanista y fuertemente religioso, a la que llamó "Misa: Pieza teatral para cantantes, actores y bailarines". Es una pieza abigarrada, donde intervienen coro masculino y femenino, coro de niños, cantantes callejeros, actores, bailarines, orquesta sinfónica, banda de marchas y banda de rock.
No se sabe si por alguna mención de su esposa - que podría haberla conocido - o porque la canción había sido grabada en los Estados Unidos por el arreglador Les Baxter, en 1956, lo cierto es que Bernstein tomó la melodía de "Casamiento de negros", de Violeta Parra, para musicalizar la presentación de la lectura de la epístola ("Esta es la Palabra de Dios"). Sin duda, un dato interesante.

Leonard Bernstein, maestro en todos los sentidos


Corrían los años 50 y la carrera de Leonard Bernstein (1918-1990) iba en alza, tanto como director cuanto como compositor. Fue en ese brillante periodo (en el cual compuso la música de West Side Story) cuando la cadena de televisión CBS le encargó realizar una serie de conciertos didácticos para la juventud con la Orquesta Filarmónica de Nueva York. La iniciativa se convirtió en un sonado éxito, y el resultado fueron 53 conciertos - verdaderas clases magistrales por su sencillez y profundidad - en los que el histriónico director (la foto puede dar una pálida idea de lo impactante y entretenido que era verlo en escena) explica, dirige, toca el piano, se entrega por entero para conseguir que sus oyentes, la mayoría niños, lograran "enganchar" con la música docta.
Estos programas se han editado en DVD (aunque no con subtítulos, y me parece que no se han comercializado en Chile) y se han retransmitido en los Estados Unidos y en diversos países muchas veces. Durante un tiempo estuvieron disponibles - al menos 15 sesiones completas, de casi una hora cada una - en YouTube, pero problemas de copyright hicieron que desaparecieran de la web. La editorial española Siruela publicó una transcripción de estas charlas ("El maestro invita a un concierto", 7ª edición, 2011), aunque desconozco si el libro estará a la venta en nuestro país. En todo caso, pueden ver la reseña aquí.


Sin embargo, aún pueden encontrarse en YouTube cuatro de estos programas, que les dejo para que los vean y disfruten. Son realmente esclarecedores para cualquier aficionado a la música, y demuestran porqué Bernstein no sólo es un maestro en el sentido tradicional que en el ámbito musical se da a la palabra, sino que también lo es en su acepción de "gran pedagogo":




El director Eckart Preu


Había titulado este artículo como "El maestro Eckart Preu", pero al leer una entrevista suya en el Stamford Magazine (http://www.stamfordmag.com/s/September-October-2011/Hitting-the-Right-Notes/) me di cuenta que tenía que cambiarlo... Este joven director, que pronto cumplirá 43 años (nació el 24 de agosto de 1969), no desea que le llamen "maestro" porque denota mucha formalidad y lo aleja de la gente. Prefiere definirse como "un hombre que trabaja duro", y se comenta que aunque aparezca de frac en los conciertos, después puede encontrársele disfrutando de una sencilla hamburguesa y una cerveza...
Nacido en Alemania Oriental, específicamente en Dresden, Eckart fue introducido en la férrea disciplina de la música por su padre, fonoaudiólogo, que prácticamente le obligó a las lecciones diarias de piano y canto, tratando que desarrollara su talento y lograra las oportunidades que él no había tenido. Muy niño, con apenas 10 años se separó de la familia para irse con su hermano mayor - también director de orquesta - al internado del famoso Dresdner Kreuzchor, un coro de niños con 700 años de tradición.
Cumplía su servicio militar cuando cayó el Muro de Berlín, lo que aceleró el desarrollo de su carrera, ya que ganó el Concurso Nacional de Directores del Servicio Alemán de Intercambio Académico, tras haber estudiado en Weimar y Francia, lo que le permitió llegar a Nueva York. Desde entonces, su carrera ha ido en permanente ascenso: desde 2004, es director de la Sinfónica de Spokane, en el estado de Washington, y desde 2005 de la Stamford Symphony (en Stamford, Connecticut), aparte de numerosas otras labores con orquestas de Estados Unidos y Europa.
"Los Estados Unidos me han hecho más expresivo", señala. "Soy tan exuberante como puede serlo un alemán oriental. El rol del director es diferente acá. En Alemania Oriental los directores están a veces escondidos, lejos de la gente, y no son muy importantes. Aquí estamos mucho más expuestos."
Según el presidente del Directorio de la Orquesta de Stamford, Steve Parrish, ver dirigir a Preu es casi como presenciar un ballet."Si te enfocas exclusivamente en él, apreciarás la música de un modo totalmente distinto."
También se comenta que le gusta conversar con el público. El explica: "Para mí es importante humanizar la música. La gente necesita conectarse con ella, y yo quiero ayudarles. Quiero que entiendan lo que están oyendo, y porqué es bueno que lo escuchen. Si lo piensan, la mayoría de los autores de la música que tocamos están muertos.Es mi trabajo - y el de la orquesta - hacer que todo esto tenga significado."
Podemos ver un adelanto de su estilo como director, y también de su faceta pedagógica, en este video del ensayo para el concierto de este viernes con la Orquesta Sinfónica de Chile:


Ojalá podamos conversar con el maestro Preu. ¡Ah! Y los que quieran, pueden visitarlo en su Facebook para verlo en familia, con su esposa y su pequeña hijita en su residencia en Spokane, Washington. Desde allí, con mucho respeto, tomamos esta fotografía que lo retrata en su entorno familiar y que nos muestra algo más de su personalidad.



miércoles, 8 de agosto de 2012

Aaron Copland, el pedagogo


Continuamos comentando a los autores que se interpretarán esta semana (viernes 10 de agosto). Ya retrocederemos para hablar de los programas anteriores, que por cierto fueron interesantísimos.
Quiero ahora hablarles sobre la faceta de educador de Aaron Copland - cuyo "Salón México" vamos a escuchar en el presente concierto de la Orquesta Sinfónica - un aspecto suyo del que yo también me beneficié personalmente (aunque, obvia y lamentablemente, jamás conocí a este gran compositor en persona). 
Si leyeron su biografía linkeada en el post anterior, ya sabrán que Copland nació en 1900 y estudió en París, de donde regresó en 1924, convertido en un músico más que prometedor. Pero, paralelamente, en 1933 inicia una fase dedicada a la pedagogía, que le lleva primero a la Universidad de Harvard y posteriormente a la Berkshire Music Center del famoso director Serge Koussevitzky, a la vez que realiza una gira por los EE.UU. como conferenciante. En 1941 es director adjunto del Centro de Música de Berkshire. 
La formación musical del público se convirtió en una de las pasiones del compositor, que escribió varios libros - todavía muy valiosos y vigentes - respecto de la apreciación musical, un tema en ese entonces aún en pañales:  "What to listen for in music" (McGraw-Hill, Nueva York, 1939),  "Our new music"  (McGraw-Hill, Nueva York, 1941), "Music and imagination"  (Harvard University Press, Cambridge, 1952), y "Copland on Music"  (Doubleday, Nueva York, 1960). De ellos, el más conocido en nuestro idioma es el primero, que con el título "Cómo escuchar la música" ha sido reeditado innumerables veces por la editorial Fondo de Cultura Económica.


"Cómo escuchar la música" es, sin duda, un gran libro, al que - como ya señalé - debo muchísimo y al cual se vuelve periódicamente, siempre descubriendo nuevos tesoros. Si lo encuentran en la biblioteca, no dejen de leerlo. Si no está, pueden ver parte de él en GoogleBooks
Echemos una rápida mirada sobre la manera en que Aaron Copland explicó el proceso de audición para el individuo que escucha música. Para él fue necesario realizar una división del proceso de audición. Estableció que todos nosotros escuchamos la música en tres planos distintos, a los que llamó: el plano sensual, el plano expresivo y el plano puramente musical. 
El plano sensual es el que se refiere al  placer instantáneo de sentirse rodeado de música, sin preocuparse de hacer ningún análisis; obviamente, este es el plano en el que la mayor parte de nosotros pone más énfasis, y es aquí donde directamente nace el gusto o el disgusto por distintos tipos de música en las personas.
El plano expresivo es el que se refiere a la percepción de un mensaje que trae la música. Es decir, este plano responde a la pregunta ¿qué comunica esta pieza?, o bien ¿qué quiso decir el compositor con esto?. Si habláramos de música popular, esta plano no poseería un peso de audición musical tan importante debido a que para la gran mayoría del público lo que quiere decir la música es simplemente lo que enuncian las letras de las canciones. Sin embargo, hablando de música clásica (o popular instrumental, en su defecto), este plano comienza a crear problemas en la percepción del público. Como el mismo Aaron Copland señala, el problema es que las personas desean que eso que la música expresa, sea completamente explicable con palabras. Eso hace que si no hay un mensaje obvio como "una tormenta", "sentimientos amorosos" o "tristeza" (por poner ejemplos), las personas no sienten que escuchan algo que "entiendan".
El plano puramente musical se refiere a la percepción de las notas en sí (sonidos) y su manipulación. Es decir, se refiere al genuino escuchar y disfrutar del manejo de los sonidos que el compositor y los intérpretes crean. Es un plano más elevado, casi técnico, donde no todo el mundo llega, pero que es el que se necesita desarrollar para disfrutar plenamente la música que llamamos "clásica".
Haciendo la diferencia entre las acciones de "escuchar" y "oír", podemos observar que el "escuchar" es prácticamente utilizar los tres planos de audición de Copland, es decir, la audición completa y profunda. Mientras que el "oír", considerado como una percepción superficial, comprende una audición enfocada al plano sensual con toques del plano expresivo. Lo que se puede concluir es que la audición musical es un asunto más complicado de lo que la mayoría piensa. Muchos piensan que "la música uno la escucha, la goza y ya"; pero Copland hace décadas ya veía este problema que atañía a todo el público y que era importante estudiar, reflexionar y explicar.
Les invito a poner en práctica estas ideas escuchando una de las obras más populares de Copland (usada en Olimpiadas y muchos programas de televisión): la "Fanfarria para un hombre común", en la excelente versión de la Orquesta Filarmónica de Nueva York, dirigida por James Levine:


Esta obra - que seguramente habían escuchado, porque es super conocida - tuvo también una versión de la banda de rock progresivo de los 60s Emerson, Lake y Palmer:


Taller Nº 5 - Compositores norteamericanos del siglo XX

El viernes 10 de agosto el programa de la temporada oficial de la Orquesta Sinfónica de Chile incluye música de compositores estadounidenses del siglo XX.
La primera obra que se escuchará es "El Salón México", de Aaron Copland (pueden encontrar su biografía aquí). "El Salón México" es una composición sinfónica en un movimiento escrita entre 1932-1936, y es la descripción musical de un salón de baile típico de esa época en Mexico D.F. La Orquesta Sinfónica de Mexico estrenó la obra en 1937, bajo la direccion del célebre compositor Carlos Chávez. La obra fue presentada en los Estados Unidos en 1938. Aunque Copland visitó México a principios de los años 30, se basó para componer no en la música que escuchó en su viaje, sino que en partituras de al menos cuatro canciones vernáculas mexicanas que había adquirido: "El Palo Verde," "La Jesusita," "El Mosco," y "El Malacate." El compositor también dirigió una grabación de esta obra para el sello Columbia.
Les ofrecemos una versión grabada por la Orquesta de Extremadura y la Orquesta Joven de esa región española en 2010, en el antiguo teatro romano de Mérida. Directores. Jesús Amigo y Miguel Romea:



También puede ser interesante ver y escuchar el arreglo para piano de esta obra que hizo el gran compositor, director y profesor norteamericano Leonard Bernstein (de quien también se interpretará una obra esta semana):


La segunda obra que se escuchará es "Meelaan", del trompetista de jazz y compositor Wynton Marsalis (su biografía aquí). Marsalis, una leyenda viviente del jazz, compuso esta obra para fagot y cuarteto de cuerdas en 1998, especialmente para el instrumentista Milan Turkovic, con quien había trabado amistad durante una gira. Se estrenó en Buenos Aires el año 2000. Aunque no hay un registro en video de esta obra, les ofrecemos una versión de Marsalis de "El Carnaval de Venecia", con la Orquesta Boston Pops bajo la dirección de John Williams, interpretación que da prueba de su capacidad para acercarse en forma magistral no sólo al jazz sino a la música en general:


En "Meelaan" actuará como solista el fagotista chileno Nelson Vinot, de quien les mostramos una composición (registrada en video aficionado) llamada "Sensaciones", en la que ejecuta el fagot solista:


El programa continúa con "La pregunta sin respuesta", de Charles Ives, compositor que permaneció prácticamente ignorado durante su vida pero que ha llegado a ser uno de los más importantes de Estados Unidos (ver su biografía). Originalmente era la primera parte de Two Contemplations (‘Dos contemplaciones’) compuesta en 1906, emparejada con otra pieza llamada Central Park in the Dark. Como sucede con muchas obras de Ives, permaneció desconocida buen tiempo hasta mucho más tarde, siendo publicada por primera vez en 1940. Hoy las dos obras son comúnmente consideradas como distintas e independientes, y pueden ser interpretadas separadamente o en conjunto. El título completo que Ives dio en principio a la composición fue A Contemplation of a Serious Matter (Una contemplación de un asunto serio) o The Unanswered Perennial Question (La perenne pregunta sin respuesta). Su biógrafo Jan Swafford la considera «una especie de collage en tres niveles distintos, coordinados ásperamente». Los tres niveles involucran la instrumentación para un cuarteto de cuerdas, un cuarteto de maderas y una trompeta sola. Cada nivel tiene su propio tempo y tonalidad. El mismo Ives describió la obra como un «paisaje cósmico» en el que las cuerdas representan «el silencio de los druidas, que no saben, no ven, ni oyen nada». La trompeta entonces lanza «la perenne pregunta de la existencia» y los vientos buscan «la respuesta invisible» pero la abandonan frustrados, de modo que al final sólo es contestada por el silencio.
Les presentamos una versión de "La pregunta sin respuesta" grabada en 2011 por la Eastman Philharmonia Chamber Orchestra, dirigida por Neil Varon:


El programa concluye con la suite de Danzas Sinfónicas de la comedia musical "West Side Story", escrita en 1957 por el el gran maestro Leonard Bernstein (ver su biografía acá). La obra - que en Hispanoamérica se conoce como "Amor sin barreras" - tuvo enorme éxito en Broadway, por lo que fue adaptada al cine en 1961, lo que la hizo universalmente conocida. El argumento está basado en la historia de Romeo y Julieta, de Shakespeare, pero adaptada a los tiempos modernos: En Nueva York, dos bandas de jóvenes, los Sharks, inmigrantes puertorriqueños, y los Jets, estadounidenses de origen irlandés, son rivales y viven en disputas. El conflicto surge cuando María, hermana del jefe de la pandilla puertorriqueña, Bernardo, y Tony, un ex miembro de los Jets, se enamoran. El musical fue innovador: por los bailes, que forman parte de la acción dramática; por la música muy variada de Bernstein (ritmos latinos, jazz, canciones de amor de gran belleza melódica...) y por la temática.
Les presentamos al propio Leonard Bernstein (sin duda, uno de los mejores directores de orquesta de todos los tiempos) conduciendo a la Filarmónica de Israel en las Danzas Sinfónicas de West Side Story:



Aprender sin aburrirse...

Dentro de las clases, hay dos videos que gozan de aceptación universal y que han resultado muy provechosos para comprender algunos conceptos que pueden ser un poco áridos al explicarlos sin la ayuda de ejemplos que nos diviertan al tiempo que nos enseñan.
Cuando se trata de explicar cómo se produce el sonido y llega hasta nuestros oídos, nadie lo hace mejor que Beakman, el científico loco de los '90s que, acompañado por su amiga-asistente y la rata Lester, hace fácil entender lo complicado:


El poder que la música ejerce sobre nosotros, que nos hace alegrarnos cuando estamos tristes (o al revés), o que une a personas aparentemente lejanas o hasta enemigas, se ejemplifica muy bien con este corto de Tom y Jerry, un clásico que ganó el Oscar en 1953 y que, además, nos permite disfrutar de la hermosa música de Johann Strauss, característica de la Viena de fines del siglo XIX:

Los dejamos aquí porque sabemos que han gustado a todos los usuarios, y seguramente querrán volver a verlos muchas veces más.